En el momento de la construcción de 1996, las comunidades indígenas viviendo en los ayllus (sector original de agricultura y áreas residenciales) no tenían agua potable. Como un acto de solidaridad, la administración en aquel momento, decidió que la piscina debía tener un tamaño modesto (6 x 3 x 1.20 m) para simbolizar la importancia de la conservación del agua y el respeto por nuestros recursos naturales en el Desierto de Atacama. Invitamos a nuestros huéspedes a escapar un momento del calor solar y tomar un refrescante baño en nuestra pequeña piscina al aire libre, teniendo siempre presente la importancia del cuidado del agua.

Terrantai también utiliza energía natural para ayudarnos a preservar la pureza de nuestro planeta. El Desierto de Atacama presenta altos índices de radiación solar (luz y calor entregadas por el sol) los cuales son convertidos en energía. El agua utilizada en el hotel y en la piscina es temperada por paneles solares y conservada en contenedores especiales de preservación de calor.